Tattwas, Fuego Sagrado y Pranayama
TATTWA (Es termino indostánico), es vibración del éter. Todo viene del éter; todo vuelve al éter.
Prana es la energía cósmica. Prana es la vibración, movimiento, luz y calor, magnetismo universal, vida. Prana es la vida del éter. La Gran vida es decir Prana, se transforma en una substancia azul intensa muy divina. El nombre de esa substancia es Akash.
"Prana es el gran aliento. Prana es el Cristo Cósmico. Prana es la vida que palpita en cada átomo, como palpita en cada sol".
"El fuego arde por Prana; el agua fluye por Prana; el viento sopla por Prana; el sol existe por Prana; la vida que tenemos es Prana. Nada podría existir en el Universo sin Prana. No podría nacer el insecto más insignificante, ni brotar la más tímida florecilla sin el Prana. El Prana existe en el alimento que comemos, en el aire que respiramos; en el agua que tomamos, en todo".
El Akash es una substancia maravillosa que llena todo el infinito, y que cuando se modifica se convierte en éter. Resulta interesante que el éter, modificándose se convierte, a su vez, en eso que llamamos Tattwas.
Vibraciones del éter (Tattwas), existen 7 tattwas, en la vida práctica nos podemos dar cuenta de 5 principalmente. Akash es el principio del Éter. Vayu es el principio etérico del aire. Tejas es el principio etérico del fuego. Prithvi es el principio etérico de la tierra. Apas es el principio etérico del agua.
"Prana es energía Universal, es vida, es Luz, es Alegría".
"El principal objetivo de la práctica del Pranayama es lograr la unión de los átomos Solares y Lunares del sistema seminal para despertar el Kundalini".
Nuestra madre Kundalini guarda en cada uno de nosotros el fuego sagrado de nuestros mágicos poderes.
Trabajando correctamente con nuestras energías sagradas tanto como solteros, como casados, lograremos el despertar del fuego, Kundalini es el fuego sagrado, universal de vida.
Este fuego sagrado de La Madre Kundalini se encuentra enroscado en el chacra Muladhara.
El V.M. Samael Aun Weor nos enseña varias prácticas para trabajar en el despertar y asenso de la Kundalini, entre ellas el Pranayama Crístico Egipcio.
Práctica Pranayama Crístico Egipcio:
"PRIMERO. Siéntese el devoto, en una silla con el rostro hacia al oriente".
"SEGUNDO. Haga mucha Oración, rogándole a la Divina Madre que le despierte el Kundalini".
"TERCERO. El pecho, cuello y cabeza deberán estar en línea vertical. No se debe doblar el cuerpo a los lados, ni hacia adelante o hacia atrás. Las palmas de las manos deben descansar sobre las piernas en forma natural".
"CUARTO. La mente del devoto debe estar dirigida hacia dentro, hacia la Divina Madre, amándola y adorándola".
"QUINTO. Cierre los ojos para que las cosas del mundo físico no lo distraigan".
"SEXTO. Tape la fosa nasal derecha con el dedo pulgar vocalizando mentalmente el mantram Ton, a tiempo se respira, o inhala muy lentamente el aire por la fosa izquierda".
"SEPTIMO. Clausure ahora la fosa nasal izquierda con el dedo índice. Retenga el aliento. Envié el Prana a la Iglesia de Éfeso situada en el coxis para despertar el Kundalini, y pronuncie el mantram Sa…"
"OCTAVO. Exhale ahora lentamente por la fosa nasal derecha vocalizando mentalmente el mantram Ham…"
"NOVENO. Clausure ahora la fosa nasal izquierda con el dedo índice".
"DECIMO. Inhale la vida, el Prana, por la fosa nasal derecha vocalizando mentalmente el mantram Ton. Retenga ahora el aliento vocalizando el mantram Ra. Clausure las dos fosas nasales con los dedos índice y pulgar. Envié el Prana al centro magnético del coxis para despertar el Kundalini".
"ONCE. Exhale muy lentamente por la fosa nasal izquierda vocalizando mentalmente la silaba mantrica Ham".
"DOCE. Esto constituye un Pranayama completo".
"TRECE. Seis pranayamas seguidos deben realizarse al amanecer y al anochecer".
"CATORCE. EL devoto se levantara de su silla y arrodillara en tierra".
"QUINCE. Colocara ahora las palmas de la mano en el suelo tocándose entre sí los pulgares".
"DIECISEIS. Inclinado hacia adelante, postrado en tierra, lleno de suprema veneración, con la cabeza hacia el Oriente, apoyara su frente sobre el dorso de las manos, al estilo Egipcio".
"DIECISIETE. Vocalizara ahora el devoto con su laringe creadora el poderoso mantram Ra, así: Rrrrrrrrrraaaaaaaaa. Vocalícese siete veces consecutivas".
Se incorporara sentado nuevamente con los ojos cerrados, da gracias a su Madre Divina Kundalini por todo lo recibido, a su propio tiempo y ritmo.
Bibliografía. EL Libro Amarillo, Ediciones Gnósticas, Capítulo VIII. Samael Aun Weor.